~ Datos personales ~

Nombre y apellidos: Merenwen Ar-Feiniel .
Edad: Aparenta 20 años.
Sexo: Femenino.
Condición vital: Viva.
Bando: La Diosa
Raza: Elfa.
Profesión: Estudiante. Aprendiz de maga.
Escuela: La Torre
Clase social: Pueblo Llano. Burguesía.

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Gustos y aficiones: Adora pasar tiempo a solas en la naturaleza ya  sea practicando tiro con arco , escuchar música o leyendo un buen libro.
Cosas que detesta: A la gente falsa y que vive de las apariencias . 
Virtudes y defectos:Es una persona leal y comprensiva, le gusta ayudar a aquellos que lo necesitan,aunque no confía en nadie mas que en ella misma. Tiene un corazón noble y desinteresado aunque no es algo que muestre a simple vista ya que es una chica bastante tímida.  Una vez que se propone algo no para hasta conseguirlo sin importar las consecuencias.  
Objetivos y metas:Su meta más clara es vivir , ya que lleva luchando por ello toda la vida y no esta dispuesta a dejarse vencer.

~ Descripción física ~

Merenwen es una joven muchacha , un poco más alta de lo normal para su edad como la mayoría de los de su raza, alrededor del metro ochenta.  Lleva una media melena castaña lisa casi siempre despeinada y algo descuidada.
Tiene una mirada profunda y penetrante,capaz de mostrar con una mirada lo que piensa, aunque a veces llega a ser bastante  intimidante, sus  ojos  son azules claros , quizá sea lo mas atrayente de su físico. Su cuerpo luce una figura definida , fuerte y con una tez pálida.

Tuvo que cambiar su forma de vestir ya que los harapos que usaba como vestidos de antes la confundían por una bandida lo que le ha llevado a darles algo de color y elegancia ya que  la gente no le juntaba demasiado ahora visto un poco mas arreglado aunque no demasiado.
En resumen podría decirse que luce un aspecto de calle  como alguien que se ha criado en los bosques dándole más importancia a la vida que a su aspecto.

~ Descripción psicológica ~

Carece de confianza en si misma a la hora de relacionarse por lo que se puede decir que es una chica muy tímida y vergonzosa, le cuesta darse a conocer realmente como es en el fondo, aunque realmente merece la pena , ya que es muy alegre y divertida.  También podría decirse que es bastante inteligente y astuta siempre sabiendo que hacer en las situaciones más difíciles.
Es muy responsable, ya que siempre se ha sentido una elfa inútil pues en 300 años desde la muerte de sus padres no siente que haya hecho nada para ayudar a los demás, ni siquiera descubrió quien mato a su familia. El hecho de no tener familia ni amigos hace que se sienta inferior al resto de su raza, por eso en cada acto intenta dar lo mejor de si luchando cada día por superarse.
A pesar de todo tiene una personalidad fuerte por lo que no es muy normal verla llorar ni desahogándose con otras personas sobre sus tragedias pues con el tiempo ha aprendido a vivir con ellas. Esto le ha llevado a aguantar bastante y no decir lo que piensa a la ligera.
La muerte de sus padres le ha llevado a ser una joven que dedica su vida por entero a ayudar a aquellos que más lo necesitan , tienen un carácter muy  bondadoso.

~ Historia ~

Merenwen nació en el lecho de una familia no muy adinerada , no más de lo suficiente para pasar el día a día, sus padres eran burgueses dedicados por entero al comercio, su padre fabricaba muebles de madera y su madre bonitos vestidos que cosía en un viejo telar de su abuela en la parte de atrás de la casa. Eran bastante hermosos , aunque la mayoría estaban dirigidos a la clase media, de vez en cuando hacia uno dedicado a alguna joven noble que pasará por sus mercados, aunque rara era la ocasión. Cada uno se dedicaba a lo que podía a duras penas y ambos enseñaban a la joven ha hacer esa ardua tarea para que en un futuro pudriera ella misma elegir que negocio decidía continuar. Era una niña muy alegre siempre dispuesta a aprender y con una bonita sonrisa en la cara.
Aunque adoraba pasar las tardes junto a su madre en el telar escuchando viejas historias sobre los dioses y guerras de antaño  prefería la fabricación de muebles de madera, ya que le parecía algo más enérgico y divertido que sentase frente a unas telas. La verdad es que no le apasionaba demasiado ambos trabajos, aunque en un futuro agradeció esos conocimientos básicos de ambos negocios.
Sus padres murieron cuando ella aun era muy joven por lo que no les dio tiempo a buscarle ningún prometido,la pobre Merenwen aun recuerda el día que llego a su casa después de jugar con unos amigos en la plaza del pueblo y encontró a sus padres tirando en el suelo de su casa. Según un viejo amigo hechicero de la familia podrían haber sido envenenados , lo que era imposible saber quien habia sido. Aun mientras duerme le viene la imagen de la silueta de sus padres muertos tirados en la vieja alfombra del salón, donde solían sentarse los tres a cenar junto a la hoguera. A pesar de estar muertos aun se podía ver el amor que sentían entre ellos y como cayeron de la mano juntos al suelo. Al parecer como ultimo esfuerzo fueron a buscar el viejo collar de la familia. Una pequeña perla de la que alrededor salían unos pequeños lazos en plata que le permitían atarselos al cuello , siendo el único recuerdo familiar que conservaba al día de hoy. Ella huérfana a los 146 años , lo que equivaldría a 7 años de edad humana tuvo que aprender a sobrevivir sola en las profundidades del bosque, ya que a los pocos años le quitaron las casa de sus padres ya que ella sola no podía pagarla. Quedando a merced de la naturaleza situó su nuevo hogar junto a un gran árbol en mitad del bosque, aunque en un principio solo llevaba su vieja manta de cama, con el tiempo se acabó convirtiendo en una pequeña cabaña solitaria en medio de los arboles donde ha vivido en compañía de un colibrí azul y un gato angora de un ojo de cada color.
Aunque le fue duro en unos primeros momentos aprendió a valerse por si misma y a fabricarse su propio arco de madera lo  que le permitió aprender a cazar para comer. Nunca supo volver a  relacionarse con otros seres sin importar la raza a la que pertenecieran. Tras la muerte de sus padres se refugió en si misma sin importar lo que pensaran los demás, por lo que ahora no tiene muchos amigos.
Finalmente tras tanto tiempo sola en el bosque, una tarde mientras se hacia una taza de te en la hoguera cerca de su casa, decidió que ya había aplazado suficientemente ese día, no sabia que iba a pasar de ahí en adelante y aunque la idea le asustaba bastante se levanto decidida de su asiento,se hizo una pequeña mochila en la que trasportar lo básico algo de comida y mantas para el largo viaje que le esperaba hacia la Torre.

" La primera regla de una Escuela de Alta Hechicería consiste en que ningún aprendiz debe rebelarse contra su Maestro"